sábado, 9 de octubre de 2010

El inicio de una nueva era...


Esperando el inicio de una nueva era

El fin de la era solar y el inicio de la vida espiritual.

Somos mortales, unidos por la sangre

Unidos por un mundo terrenal…

Atados a la realidad constante

A la monotoneidad del egoísmo.

Acostumbrados a la oscuridad del camino

a la falta de compañerismo…

Solo siendo mortales del diario vivir…

Si, somos pocos, pero cada día somos más pocos

Tengo la certeza, no soy un profeta, no soy un sabio

Pero se que quiero luchar por cambiar el mundo

marcar mi huya verde en el sendero oscuro

debemos marcar una nueva era,

una era de humanos, de gente sabía, de personas racionales...

El inicio de una nueva era, una era donde no exista

la imposición de una verdad absoluta, una verdad completa

la imposición de una realidad, Jamás existirá una verdad

Que complazca la mente de todos, la mente de todos nosotros

los mortales que queremos cambiar… Cambiar el mundo…

O al menos hacer un intento, uno mas….

lunes, 20 de septiembre de 2010

Esperanza, fe y olvido


Yace allí la paradoja constante del mundo

entre escoria, entre sucias plegarias y desdenes.

Suaves desaires que interrogan al mundo.

Doseles teñidos de amargura, de un ambiguo color neutro.

Ante las vivas llamaradas de la herida vivo,

me alimento de aquellas breves e ignotas almas incandescentes.

Consecuentemente a las horas del reloj

aquel descanso muere al alba, a la penumbra del ahora

sollozando al regazo del mañana y muriendo al ocaso del ahora.

Allá entre escoria, entre sucias plegarias y desdenes

allá es donde apenas sobrevivo.

Yo: Esperanza, Fe y olvido.

Allá donde todo esto es sólo un delirio.

domingo, 19 de septiembre de 2010

¿Por qué la luna no tiene sangre?


¿Por qué la luna no tiene sangre?

Es porque espera acallada a la noche eterna

el eclipse oculto tras las venas, tras el alcohol

la catarsis melódica de un solsticio insólito

¿Por qué la luna no tiene sangre?

Es porque ha muerto a la espera del regreso

al retorno de aquel breve encuentro

y tras la espera del lento tiempo muere en silencio.

La luna no tiene sangre…

Porque espera a su amado el sol.

Aquel que rebosa de alegría; el sol es su corazón.

¿Por qué la luna no tiene sangre?

Simplemente porque ha muerto.

Murió entre las estrellas, entre las lejanas estelas

y allí su alma se pudrió.

La luna no tiene sangre porque se marchitó.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Entre paisajes.

Entre paisajes y sombríos recuerdos

el amor perecedero muere inmune al desvelo.

subyacen entre el subsuelo y mi cuello un oleaje de desespero

llanto, dolor amargo que ambiguamente me inunda a caudales.

Rojas rosas que despiertan en mi cinceles

concreto duro de roer, un adiós duro de marcar

compases inconclusos a la hora de terminar.

simplemente ayer para vivir.

entre paisajes y sombríos recuerdos,

bajo aquel sauce marchito en el tiempo

mueren uno a uno el eco de mis versos…

versos que esperan a la voz del viento

sosegando entre tus dedos y mi entierro.

jueves, 26 de agosto de 2010

El maíz de mi tierra.

Entre las verdes ramas el maíz nace

siembra y cultiva violencia y miseria.

Desnudos en el agua muertos los cuerpos

regresando al desvelo promesas rotas.

Entre el maíz se enredo la muerte

danzante sobre victorias de guerra.

Tepache para aquel que no nace.

Mezcal para el que quiere olvidar.

Pulque para aquella alma violada.

“Risas, fiestas y alegrías: La victoria”

la victoria de la mediocre vida.

Entre verdes ramas el maíz cosecho

y cosecho en el miedo y olvido

enmarco en oro las condenas

ahogando sueños y un mañana

sólo para tener, sí, tener otro día en la vida.